Recuerdas cuando una de cada palabra que salía de tu boca era “yo” “o sea” o “cool.” Y ¿no podías parar? Recuerdas cuando sentías un increíble impulso de comer chocolate o ver novelas o ir de compras por cosas que no necesitabas o hablar por télefono horas largas con tus amigas o amigos. Escribe acerca de tu lucha para vencer un pequeño vicio, que decidiste podías vivir sin él. ¿Cuál era tu atracción hacia ese vicio? ¿Cómo venciste el hábito?